A pesar de los sencillitos que parecen, estos dibujos eran un auténtico martirio. De alguno de estos lugares no había practicamente fotos y había que ir a dibujarlos "in situ", después había que hacer un trabajo ímprobo de síntesis y por último y peor, había que hacer unas perspectivas falseadas en picado de cada dibujo. Pongo algún boceto a lápiz y el resultado final para montar sobre el plano.
Que malo es dibujar edificios, oiga.
¡Y coches, coches también!
2 comentarios:
Dímelo a mi que me tuve que hacer todo el castillo de Edimburgo Fuentecilla del siglo vete a saber hipercargada de barroquismos angelotes pececillos y mil vainas incluido. Para sacarlo tan solo en 3 viñetas de un trabajo de 10 paginas para 3 días después a todo color, maquetado, y encuadernado.
Por eso me mola la ficción porque solo te complicas la vida tu mismo con lo que tu te la quieras complicar y hasta done quieras complicartela
Cierto. Decía John Byrne en un momento de lucidez que el auténtico dibujante se demuestra en su planteamiento de los ambientes cotidianos, los más difíciles y los menos agradecidos para lucirse antes que en las imágenes de ficción, más espectaculares pero también mucho más indulgentes con su creador.
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