Pero ya estoy aquí.
Y empezamos reseñando las jornadas en Pinolere, una localidad norteña de esta sufrida isla que cuenta con una feria de artesanía muy conocida.
Este año, gracias a mi amigo, el simpar Victor Bidart, hombre orquesta que entre otras de sus múltiples atribuciones cuenta con el dudoso estatus de humorista gráfico (¡El otro dibujante noctámbulo junto con el que suscribe, de nuestra aburrida profesión!) la vaporosa Asociación de Humoristas gráficos de Canarias tuvo su lugar por allí, con una bonita exposición. Lástima que a excepción del propio Victor, los demás nos fuesemos descolgando por las causas más diversas. En fin, a ver si el año que viene...
Este fue el cartel que hicimos Victor y yo al alimón para la cosa. Suya es la idea, huevo frito y textos, los machangos son míos.
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